NIÑOS Y JÓVENES EN TIEMPO DE COVID-19
Los niños y a los adolescentes llevan un mes y medio encerrados en sus casas. Durante este tiempo de confinamiento forzoso no han podido salir a la calle, no han visitado a familiares o amigos. Tampoco han podido asistir a clases. Todos estos factores influyen en el estado de ánimo de niños y adolescentes. Es normal que se encuentren más nerviosos, más enfadados y muchas veces desanimados o apáticos.
El refuerzo, sobre todo social, que tenían al estar con sus compañeros y profesores ya no está. Actividades cotidianas que antes de confinamiento hacían han desparecido como ir al patio a almorzar o hacer gimnasia. Planificar rutinas de ocio y también alguna tarea doméstica es de gran ayuda para llevar de la mejor forma posible estar tantos días en casa. Es importante que ellos participen de la planificación para que existan rutinas que les gusten. También es recomendable realizar ejercicio físico en casa.
Ayudar a los niños y adolescentes con un lenguaje apropiado a la edad y a su momento evolutivo a expresar sus emociones es una buena tarea en familia. La expresión de la incertidumbre, de la ansiedad y delas preocupaciones facilitará que estén mejor y fortalecerá las relaciones familiares.
MANTENER EL CONTACTO SOCIAL
El contacto social lo podemos hacer usando las nuevas tecnologías. Llamar a los abuelos y otros familiares, a compañeros produce bienestar psicológico y sensación de menos aislamiento.